Respeto y Educación

Respeto y Educación 

Desde siempre la forma de cerrar actuaciones ha sido presencial, (siempre que la distancia y las circunstancias lo permitiesen claro está )...es decir, uno se acercaba a un local al efecto, preguntaba por el dueño o la persona en cuestión que llevase el tema de las contrataciones, y se hablaba con el cara a cara llegando o no a algún acuerdo por ambas partes.

Para ello se requería algún soporte físico, ya fuese un disco, maqueta, vídeo o algo grabado decentemente, con cierto nivel y profesionalidad. Y ya después de esa primera toma de contacto con solamente llamar por teléfono se podían cerrar así las fechas.

Pero desde la llegada de internet y las redes sociales esto se ha perdido casi en su totalidad, (al igual que el llamar por teléfono), quedando todo reducido al contacto por messenger, facebook, wassap, mail y otros tipos de aplicaciones, sistemas, plataformas o como queramos llamarlo. Cosa que evita el trato directo y permite eludir contestaciones y respuestas por parte de todos, sobre todo de los locales que no contestan a las propuestas y peticiones para actuar, ahorrándose dar la cara y decir las cosas claras. Vamos, en definitiva ausencia de profesionalidad y legalidad en este aspecto, por no decir que más bien se trata de una falta de educación y respeto, en cuanto a relaciones humanas se refiere.

Y por supuesto que se entiende que reciban cientos, miles o millones de propuestas de grupos queriendo tocar,  pero ese es su trabajo y para eso tienen un local donde promueven la música en directo,....con lo cual es algo con lo que ya contaban y deberían de estar preparados para gestionar estas actividades propias del negocio.

Para ello tendrian que ser más selectivos y dar prioridad a la calidad antes que al amiguismo o al interés en función de la cantidad. Y claro, SI, sabemos que han de pagar camareros, técnicos, infraestructura y lo que quieran,...pero también las bandas pagan sus instrumentos, sus discos, sus locales para ensayar, sus clases, etc,...con lo cual no es excusa justificable decir esto, porque el local, sala o garito, igualmente tendrá que abrir sus puertas y pagar a sus empleados independientemente de que haya o no espectáculo ese día.

Y normal que ciertas bandas no encajen con su estilo o no gusten al programador o no caigan bien a quien quiera que sea, pero al menos hay que ser selectivo y escoger lo que mejor suene, que funcione y que tenga cierta trayectoria y grabaciones de calidad así como una imagen y un conjunto de características que hagan de ese grupo un producto de calidad.

Pero por desgracia en este país prima más la cantidad que la calidad,(cuánto personal arrastre la banda sin importar si suenan bien o gustan más) y se valora más el amiguismo y el interés generalizado en pro del beneficio personal y ánimo de lucro, que el Arte en sí y el buen hacer musical.

Si bien es cierto que, todo esto viene ligado a que las bandas tienen un cache y cobran por tocar, siendo comprensible que se haga así puesto que de alguna forma han de sufragar sus gastos. Como poco para pagar el local de ensayo, o el combustible para los desplazamientos, o el mantenimiento de la banda,.... 

Tocar gratis acabaría con todos los problemas, está claro, pero para ello también los locales tendrían que dar de beber gratis a los asistentes y no cobrar entradas.

Con lo cual y como dice el dicho, “aquí jugamos todos o se pincha la pelota ” o más bien, “voluntario ni para comer” o “todos o ninguno”.... Y de esta manera sería un trato bastante más justo para todos.

Y he aquí los hechos y sus consecuencias del desarrollo del valor musical en este país.