La Búsqueda del Santo Grial

La Búsqueda del Santo Grial:

No soy para nada un gran guitarrista, ni un virtuoso en absoluto, ni siquiera me asomo ni me acerco,...ni amante de las grandes saturaciones ni sonidos extremos, ni de la velocidad, ni las escalas “raras”, ni técnicas del tapping y derivados,...

Mas bien al contrario. Me decanto más por el blues y los tonos cálidos, redondos y sin crispaciones ni estridencias, y decorándolos en ocasiones con ciertos efectos para nada extravagantes, tales como reverbs, chorus o delays.

Por todo ello ya he pasado y sin encajar en mi gusto ni estilo, segui y sigo buscando ese santo grial del tono. Redondo, cremoso y lleno, que dan ciertos amplificadores, guitarras y efectos.

Y es que todos tenemos en nuestra mente el tono de cierto artista y ya lo quisiéramos para nosotros, pero eso es harto complicado, por no decir imposible,...ya no por tener su mismo equipo, sino porque sencillamente no somos esa persona.

Cada uno sonamos, sentimos y vibramos de una forma única e inigualable,...y por eso nunca podremos ser otro que no seamos nosotros mismos.

Lo único que tenemos que hacer es encontrar ese tono, eso sonido, ese equipo, esa imagen y esa actitud con la que sentirnos cómodos y a gusto, sin imitar a nadie y tratando de ser nosotros mismos.

Puede que guste más o no,...que seamos mejores o no,...que triunfemos o no,...pero una cosa estará clara,...que seremos nosotros mismos, únicos e inimitables, y lo más importante sentirnos cómodos y a gusto con el resultado conseguido.

Por todo esto y más he llegado a la conclusión de que, esta búsqueda del santo grial del tono y encontrarlo es prácticamente imposible, pues siempre estaremos trasteando cómo mejorarlo, y en nuestra mente nunca estará como realmente lo soñamos, y siempre querremos ir más allá, probar otra cosa, añadir otro efecto, etc.

Así que como anteriormente dije, la cuestión es encontrar ese equilibrio donde sentirnos cómodos para así poder  desarrollar nuestro arte, y considero que el equipo que tengamos, sea cual sea, no es relevante, pues siempre tenderemos a sonar y vibrar de la misma forma y manera, debido a que así siente nuestro cuerpo, siendo ese el sonido, tono y sensaciones que sacaremos y transmitiremos a nuestro instrumento, haciendo característico nuestro estilo, ese por el cual se nos reconocerá.