Elegancia, orden y concierto

Elegancia, orden y concierto:

Quizá muchos ya saben y hacen todo esto, pero no viene mal recordarlo, y aún sabiéndolo, me he visto sobre algunos escenarios poniendo orden y concierto en algunos aspectos para poder trabajar lo más cómodamente posible.

Cuantas veces hemos oído eso de...!!!que clase tiene ese tío!!!??....y cosas por el estilo???,...muchas verdad??!!!,...pero no todo es tocar bien, tener conocimientos, buena ejecución y tono, etc,... hay más que eso sobre un escenario, y en general en la música y espectáculo.

A lo que me refiero, es que tanto como cuidamos nuestra forma de tocar, ser más rápido o tener más nivel musical de cara al instrumento en sí,...debemos también cuidar nuestra imagen, la limpieza y la organización sobre el escenario y tras el.

De que nos sirve tener la mejor guitarra del mercado si está roñosa y sucia, con las cuerdas oxidadas y la electrónica hecha un desastre???,...o el mejor amplificador si este no es más que una caja de ruidos incesante???,...o los mejores pedales si estos cuentan con cables descuidados y problemáticos???!!!,...

Por eso es importante cuidar y revisar nuestro equipo, pues se trata de nuestra herramienta de trabajo en la cual confiamos nuestro buen hacer,...y no descuidar su mantenimiento.

Así mismo, nuestra imagen,...primero sabiendo y teniendo claro lo que queremos mostrar,...ya seamos músicos de jazz, blues, metal o pop,...se trata de tener una imagen acorde con el estilo a interpretar dentro de nuestro gusto y alcance, pero siempre de forma cuidada y aseada. Cuidando nuestra puesta en escena, gestos, formas de hablar, actitudes, etc, pero siempre de forma elegante, educada y profesional.

Y por otro lado el orden dentro y fuera del escenario.

Sobre las tablas, o en el estudio, o en el local de ensayo,...tratar siempre de tener los equipos bien colocados, visibles y con fácil acceso en lo máximo posible,...evitar tener cables y pedales o accesorios de por medio, entorpeciendo nuestro paso o/y el de cualquiera y ocupando no más que nuestro sitio asignado, y no tener aquello como si de un plato de espaguetis se tratase.

Y por otro lado, a la hora de recoger y guardar el equipo para su transporte y almacenaje.

Enrollar bien los cables y que estos no tengan curvas ni dobleces imposibles, lo que produciría averías y enredos engorrosos.

Limpiar y secar los instrumentos, como por ejemplo, las cuerdas y zonas de más contacto y fricción.

Y tratar los equipos con cuidado sin golpes y tratando de evitar caídas que producirían averías en algunos casos importantes e irremediables.

Y por supuesto no os olvidéis de vigilar vuestros trastos,...no perderlos de vista y tenérlos a buen recaudo, pues ratones colorados hay muchos y pueden estar en cualquier sitio.